Empecé a tener mi primer contacto con la artesanía de chaval, en Bergara;  con la cerámica,  haciendo artesanía con materiales reciclados, haciendo  tambores…

En un viaje que hice a Sudamérica me introduje en el mundo de la orfebrería de cabezas. Después todo esto me llevó a especializarme en la plata, trabajando también otros metales como el cobre… Durante unos diez años he estado trabajando la plata sin pausa, haciendo demostraciones en ferias y pasando gran parte  de mi tiempo en el taller produciendo material para después  vender en los pueblos.

Poco a poco me fui dando cuenta lo mucho que me llamaba la atención las fraguas que me encontraba en las ferias y fui entablando amistad con herreros como SUOKER,  LUIS ALBIAC… de esta manera visite sus talleres, y emprendí la dura aventura de introducirme en la forja.

Al principio,  empecé autodidacta con unos libros de forja y trabajando al aire libre con una fragua que conseguí de la chatarra…en seguida vi que necesitaba ayuda para continuar avanzando y recurrí a maestros como Ramon Recuero, Germán Azote…y también empecé a ir a encuentros de herreros nacionales e internacionales con el fin de seguir enriqueciéndome en los conocimientos de este viejo oficio.

Sin darme cuenta me encontraba trabajando con Santiago Martinez Otero, Forxas Chago, en la Catedral de Santiago de Compostela, el Concello de Santiago… desmontando, restaurando y montando piezas históricas, de diferentes materiales, y aprendiendo diferentes técnicas de restauración. Y sobre todo con la emplomadura, un oficio especifico que casi hoy en día roza la desaparición.

Después de esta increíble experiencia me volví a Euskal Herria donde he seguido haciendo trabajos de restauración y también obras contemporáneas. Hoy en día sigo aprendiendo y creciendo en uno de los oficios más antiguos de la humanidad y madre de todos los oficios.

Estuve aprendiendo en Viloria (navarra) a hacer Carbón vegetal, pues durante siglos este a sido el combustible de los herreros y otro oficio hermoso pero sacrificado que a caído en desuso. Suelo hacer alguna carbonera ocasionalmente en Leintz Gatzaga.

Estoy interesado en  todo lo que respecta a la tradición de la herrería y la orfebrería, las aizeolas (primeras fundiciones). En recuperar técnicas y conocimientos de las técnicas  artesanales de los trabajos en hierro, acero, y otros metales.

Hoy en día en  SUALAIFORJA, estoy yo, dispuesto a emprender cualquier tipo de trabajo en todo tipo de metales, sean férricos o no, siempre desde el punto de vista ARTESANAL. Cuando los trabajos son de gran envergadura,  cuento con un gran EQUIPO que me respalda, con los cuales trabajo en conjunto para poder abarcar tantas y tantas técnicas, diferentes  materiales y maneras de hacer, poder tener diferentes puntos de vista para examinar y resolver diferentes situaciones, compañeros  con mucha experiencia en diferentes ámbitos,  bien necesaria para controlar y ejecutar correctamente las restauraciones y obras nuevas, pues este nuestro oficio es tan amplio que se necesita muchas veces trabajar en equipo.

SUALAIFORJA y todo lo que a su alrededor se encuentra colaborando y participando tenemos un gran compromiso con nuestro oficio artesano y ante todo  priorizamos el bien hacer y la honestidad en cuanto a nuestro oficio y nuestros clientes.